
La Organización Venezolanos en el Mundo propuso junto con Hecho Por Venezolanos celebrar el 21 de octubre como el “Día Internacional del Tequeño», en conmemoración de la fundación de la ciudad de Los Teques el 21 de octubre de 1777.
El tequeño, conocido por su delicioso relleno de queso fresco envuelto en una masa crujiente, es un símbolo de la cultura y las tradiciones de Venezuela, presente en la mesa de muchos hogares.
Este día resalta la importancia del tequeño como embajador gastronómico del país, no solo en su tierra natal, sino también en el extranjero. En naciones como España, su popularidad ha ido en aumento, siendo cada vez más común encontrarlo en bares y restaurantes, así como en eventos sociales.
El tequeño, que tradicionalmente se prepara con queso fresco, ha evolucionado y se ha diversificado, adaptándose a diferentes culturas y preferencias culinarias. Hoy en día, es posible encontrar versiones que utilizan ingredientes innovadores, incluso dulces como el chocolate, expandiendo su atractivo y sabor.
Este plato, elaborado históricamente con masa de trigo y queso blanco, hoy tiene una variedad de rellenos dulces y salados. A continuación, seis recetas originales.
Celebramos no solo su sabor inigualable, sino también su legado cultural y su capacidad para unir a las personas alrededor de la mesa, en Venezuela y más allá. ¡A disfrutar de un tequeño!
La versión tradicional permanece vigente y es reconocida internacionalmente como el formato clásico del tequeño.
Tequeños originales de queso blanco
Ingredientes
400 gramos de queso blanco semiduro
300 gramos de harina de trigo
60 gramos de manteca sin sal
1 huevo
120 ml de agua
1 cucharadita de sal
Aceite vegetal para freír
Preparación
Mezclar la harina con la sal en un recipiente amplio.
Incorporar la manteca a temperatura ambiente y trabajar con las manos hasta obtener una mezcla arenosa.
Añadir el huevo y, poco a poco, el agua hasta formar una masa suave y elástica.
Cubrir la masa y dejar reposar durante 20 minutos.
Cortar el queso en bastones alargados.
Extender la masa sobre una superficie enharinada, dejarla de unos 3 milímetros de espesor y cortar en tiras de 2 centímetros de ancho.
Enrollar cada trozo de queso con una tira de masa, procurando sellar bien los bordes y extremos.
Calentar abundante aceite vegetal y freír los tequeños hasta lograr un tono dorado uniforme.
Retirar y dejar escurrir sobre papel absorbente antes de servir.