La congresista estadounidense María Elvira Salazar ha dado un golpe contundente en la lucha por la justicia y la libertad de Venezuela.
Su propuesta de enmienda a la Ley Pana, aprobada unánimemente por el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, va más allá de ser un simple proyecto legislativo: es una reivindicación para un pueblo que ha sufrido décadas de opresión y devastación.
Con esta iniciativa, Salazar busca transformar el dolor causado por el saqueo y la destrucción chavista en una oportunidad de redención.
Los casi 4.000 millones de dólares, arrebatados a narcotraficantes y criminales vinculados a los regímenes de Hugo Chávez y Nicolás Maduro, no serán un botín olvidado.
En cambio, se convertirán en una herramienta poderosa para financiar la reconstrucción de una Venezuela democrática, un país que anhela volver a ser libre, próspero y soberano.
«Así comenzará la reconstrucción de Venezuela después de décadas de devastación», declaró Salazar, quien fue recibida con alegría por millones de venezolanos dentro y fuera de sus fronteras.
Este no es solo un acto de justicia contra quienes saquearon la nación, sino un compromiso con el futuro, un puente hacia la recuperación de una patria que renacerá con toda la fuerza de un pueblo valiente, bendecido por Dios.
