El Gran Priorato de la Orden Militar y Hospitalaria de San Lázaro de Jerusalén en Venezuela elevó este miércoles una denuncia formal ante la Secretaría de Estado del Vaticano y ante su homólogo en España, tras lo que calificó como un “grave acto de violación diplomática” cometido por funcionarios del chavismo contra el Cardenal Baltazar Enrique Porras Cardozo en el Aeropuerto Internacional de Maiquetía.
Por lapatilla.com
Según el documento firmado por el canciller del Gran Priorato venezolano, José Leonardo Carta Tirado, el Cardenal Porras, Protector Espiritual de la Orden, fue retenido injustificadamente, sometido a tratos humillantes y se le impidió abordar un vuelo con destino a Bogotá y conexión posterior a Madrid, donde participaría en una solemne ceremonia de investidura.
El informe detalla que los funcionarios de inmigración confiscaron y anularon su pasaporte venezolano, mientras que también se le negó el embarque aun presentando su pasaporte del Estado Vaticano, documento que le confiere prerrogativas diplomáticas como Príncipe de la Iglesia.
La denuncia asimismo sostiene que el prelado fue sometido a una requisa degradante, incluyendo revisión de efectos personales y vestimenta con perros antidrogas, mientras su equipaje era retirado del avión ya preparado para despegar.
El Gran Priorato advierte que estos hechos constituyen un quebrantamiento directo de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, destacando los artículos que garantizan la inviolabilidad personal de los agentes diplomáticos, la inmunidad de jurisdicción y la prohibición de inspeccionar equipaje diplomático salvo en circunstancias excepcionales y siempre con pleno respeto a la dignidad del representante.
También subraya que el incidente contradice principios fundamentales de la Carta de las Naciones Unidas sobre el respeto a la soberanía de los Estados y las prerrogativas de sus representantes diplomáticos.
Ante la gravedad de lo ocurrido, el Gran Priorato solicita formalmente:
Que la Secretaría de Estado del Vaticano presente una protesta oficial ante el régimen venezolano por la violación de las prerrogativas diplomáticas del Cardenal Porras.
Que el Gran Priorato de España informe al Gran Maestre de la Orden y se solidarice institucionalmente frente al atropello.
La restitución inmediata de los documentos confiscados y la garantía del libre tránsito internacional del Cardenal, conforme al derecho internacional vigente.
La carta, firmada desde Caracas este 10 de diciembre, concluye expresando “profunda indignación” y reafirmando la defensa de la dignidad de la Orden y de la Iglesia ante “la gravedad de los hechos ocurridos”.
