En una transmisión televisiva, Nicolás Maduro afirmó que los servicios de inteligencia venezolanos impidieron un presunto plan para colocar explosivos en la embajada de Estados Unidos en Caracas, lo que, según el mandatario, formaba parte de una “operación de bandera falsa” destinada a generar un conflicto directo con Washington.
Por: El Tiempo
La denuncia llega en un contexto de máxima tensión militar y diplomática, marcado por la presencia de buques y aeronaves estadounidenses en el Caribe y por la decisión del presidente Donald Trump de suspender los canales de diálogo con el régimen venezolano.
Según Maduro, “dos fuentes confiables, una nacional y otra internacional”, habrían advertido sobre el intento de atentado, el cual —de concretarse— habría buscado culpar al propio chavismo para justificar una escalada internacional.
Lo que se conoce del presunto plan y sus implicaciones
El líder chavista no reveló nombres ni pruebas, pero aseguró que la información provenía de contactos con “sectores de la derecha local vinculados con intereses extranjeros”. De acuerdo con su versión, el objetivo era “provocar una respuesta militar inmediata” de parte de Estados Unidos.
Desde 2019, la embajada estadounidense en Caracas permanece cerrada, y solo conserva personal destinado al resguardo de las instalaciones. Aun así, el Ministerio de Defensa venezolano reforzó la seguridad en el área y aumentó los patrullajes en zonas aledañas tras la alerta.
La advertencia de Maduro coincidió con nuevos reportes sobre operaciones navales estadounidenses contra embarcaciones presuntamente vinculadas al narcotráfico en el Caribe.
En una de ellas, cuatro personas murieron, lo que avivó las acusaciones del régimen venezolano de que Washington usa la lucha antidrogas como pretexto para justificar acciones militares en la región.
Por su parte, la Casa Blanca no emitió comentarios directos sobre la supuesta conspiración, aunque fuentes citadas por Reuters confirmaron que Trump ordenó detener cualquier acercamiento diplomático con Caracas.
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