Un reciente informe publicado por la organización Transparencia Venezuela en el Exilio reveló que, a pesar del despliegue militar estadounidense en el Caribe, el 41% de los buques petroleros que operaron en las costas venezolanas durante el mes de noviembre fueron clasificados como «irregulares». El documento, titulado «El 40% de los tanqueros que llegan a Venezuela son irregulares», destaca que de los 98 buques detectados, 40 pertenecen a categorías de sancionados, furtivos o de la llamada «flota oscura».
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El análisis detalla una caída general en el tráfico marítimo petrolero, registrando 14 buques menos que en octubre, un descenso que la organización atribuye a las crecientes tensiones y al «operativo militar» de Estados Unidos en la región. Sin embargo, la estructura de evasión de sanciones se mantiene activa: 17 de estos barcos llegaron con sus sistemas de identificación automática (AIS) apagados para evitar ser rastreados.
El incidente del petrolero ruso y el USS Stockdale
El reporte documenta un episodio de tensión naval ocurrido a mediados de mes. El tanquero SEAHORSE, de la «flota oscura» rusa y sancionado por la Unión Europea, intentó ingresar a Venezuela proveniente de Cuba el 13 de noviembre. Según el informe, el destructor estadounidense USS Stockdale obligó a la nave a frenar su desplazamiento al noroeste de Aruba.
A pesar del bloqueo inicial, el buque logró llegar a las cercanías del Complejo Petroquímico de Jose el 23 de noviembre. No obstante, nunca atracó en el terminal; permaneció fondeado al este de la isla La Borracha hasta el 29 de noviembre, cuando emprendió su retirada hacia África occidental sin completar su carga aparente.
Chevron aumenta sus envíos y China triangular la carga
Mientras el tráfico ilegal enfrenta obstáculos, las operaciones formales de Chevron mostraron un repunte significativo. La petrolera estadounidense aumentó su actividad de 3 tanqueros en octubre a 8 en noviembre, enviando crudo venezolano a puertos de Texas y Luisiana como Corpus Christi y Beaumont.
Por otro lado, las exportaciones a China, que representan más del 80% del total según Reuters, continúan realizándose bajo esquemas de ocultamiento. El informe señala que los buques no declaran puertos chinos como destino en sus manifiestos, aunque sus rutas de navegación evidencian que el gigante asiático es el receptor final de la carga.
Alerta: ¿Cocaína en los tanqueros?
Uno de los puntos más alarmantes del informe es la posible vinculación de estos buques con el narcotráfico. Transparencia Venezuela plantea la interrogante de si la «flota fantasma» está siendo utilizada para transportar cocaína además de petróleo.
El documento cita investigaciones que señalan a Venezuela como un puente clave para el envío de droga hacia Europa a través de África occidental (el Sahel). La organización advierte que la ruta Venezuela-Senegal es una de las más frecuentes en los movimientos de estos tanqueros irregulares, lo que sugiere que las plataformas petroleras podrían estar sirviendo de camuflaje para operaciones de crimen organizado a gran escala.
Con información de Transparencia Venezuela
