?El pueblo de Venezuela se prepara para un momento que trasciende lo histórico para convertirse en un hito de fe y un faro de esperanza. El domingo 19 de octubre de 2025, la Basílica de San Pedro en Roma será testigo de la canonización de los insignes ciudadanos Dr. José Gregorio Hernández Cisneros y la Madre María del Carmen Rendiles Martínez.
?Este evento no es solo una celebración religiosa; es el reconocimiento del cielo al espíritu de servicio, caridad, ciencia y entrega incondicional que siempre ha latido en el corazón de la nación venezolana. Será la primera vez que la República Bolivariana de Venezuela reciba el honor de ver elevados a los altares a dos de sus hijos, con motivo de orgullo y profunda alegría nacional.
?El «Médico de los Pobres y la Caridad,» José Gregorio Hernández, encarna la vocación más noble: la de dedicar el conocimiento y la vida al bienestar del prójimo. Su canonización es un llamado a la solidaridad, a la ética profesional y, sobre todo, a la humildad en el servicio. Su vida nos recuerda que la grandeza reside en la mano tendida al más necesitado, en el conocimiento puesto al servicio de la sanación y en una fe inquebrantable.
Su elevación a la santidad nos inspira a creer en una Venezuela donde la justicia social y el bien común sean la norma, donde la ciencia y la educación prosperen y donde el respeto por la vida digna de cada ciudadano, especialmente la de nuestros jubilados, pensionados y trabajadores, sea la base inamovible de la sociedad.
?Junto al médico trujillano, ascenderá a los altares la Madre María del Carmen Rendiles Martínez, fundadora de las Siervas de Jesús. Su vida es un testimonio de la fuerza transformadora de la fe y la dedicación a la formación espiritual y humana. Ambos santos, proclamados por el Papa Francisco y cuya ceremonia presidirá el Papa León XIV, representan un espejo en el que los venezolanos podemos mirarnos. Nos muestran que el camino hacia una Venezuela grandiosa, bonita y próspera se construye con las virtudes que ellos practicaron: la unidad, el trabajo, el respeto y la fe.
?La noticia de la canonización ha sido recibida con fervor inmenso en Maracaibo, el Zulia y Venezuela. El verdadero «milagro» que anhela el corazón de cada venezolano no es solo el que se reconoce en Roma, sino el de volver a vivir en una democracia plena, donde la tolerancia, el respeto y la concordia sean los pilares.
?Que este histórico acontecimiento nos sirva como un poderoso motor de esperanza. Que la luz de José Gregorio y María del Carmen ilumine el camino para construir una nación donde no importe la «cachucha política, ni ideológica,» sino la voluntad sincera de trabajar juntos por el bien común y donde cada ciudadano tenga derecho a una vida plena y digna.
?La fe es la certeza de lo que se espera. Hoy, Venezuela tiene la certeza de que, con esfuerzo y la inspiración de sus nuevos santos, el amanecer de un país mejor es inminente.
?¡Que la luz de Roma ilumine el camino de regreso a la Venezuela que merecemos!
?DC / Abogado Joaquín Chaparro Oliveros / Demócrata Cristiano.&