
El Ejército chino completó recientemente el primer entrenamiento en mar abierto con aviones de combate de su nuevo portaaviones Fujian desde su reciente entrada en servicio, unas maniobras destinadas a poner a prueba el sistema de catapultas electromagnéticas y la coordinación entre buques y aeronaves.
Según la cadena estatal CCTV, un grupo de combate encabezado por el Fujian e integrado por varias embarcaciones, entre ellas los buques Yanan y Tongliao, regresó en los últimos días a una base naval en la ciudad meridional de Sanya tras concluir un ciclo de ejercicios en el mar.
Durante la misión, varios tipos de aeronaves embarcadas, entre ellas los cazas J-35, J-15T y J-15DT y el avión de alerta temprana KJ-600, realizaron múltiples despegues mediante catapulta y tomas en la cubierta, lo que permitió verificar las capacidades del portaaviones en materia de lanzamiento electromagnético, así como la compatibilidad entre el buque y los distintos modelos de aparato.

Un oficial del Fujian citado por CCTV señaló que, a medida que se avanza en el entrenamiento con equipos ya instalados, la tripulación «adquiere un mayor conocimiento» acerca del rendimiento de los sistemas de catapultas y frenado, maneja con más soltura los equipos y refuerza la coordinación entre los distintos puestos y los pilotos, lo que sienta la base para operaciones «seguras y eficientes» de lanzamiento y despegue de aeronaves.
El grupo de combate llevó a cabo además ejercicios de navegación en formación y prácticas de búsqueda y rescate conjuntas entre buques y aeronaves, según el medio, que no precisó la fecha de las pruebas.
CCTV indicó que este ciclo de adiestramiento, descrito como una actividad prevista en el plan de trabajo, busca comprobar los resultados de la instrucción de las tropas y elevar su capacidad para «proteger la soberanía, la seguridad y los intereses de desarrollo» de China.
El Fujian es el primer portaaviones chino equipado con catapultas electromagnéticas y el tercero incorporado a la Armada del país.
Diseñado y construido íntegramente en China, fue botado y nombrado en junio de 2022 y entró en servicio el pasado este mes durante una ceremonia de entrega de bandera en la isla meridional de Hainan.
Sus dos predecesores, el Liaoning y el Shandong, derivan de diseños soviéticos y emplean rampas de despegue en lugar de catapultas, un sistema que limita la carga de combustible y armamento de las aeronaves.
La introducción del Fujian marca así un salto tecnológico significativo dentro del programa de modernización del Ejército chino, que aspira a contar con varias unidades de este tipo en los próximos años.
EFE