La escasez de gasolina desde hace unos años se ha convertido en un sempiterno calvario para los venezolanos conductores de vehículos, tanto así, que ya es muy difícil para muchos recordar tiempos mejores. 

Resulta paradójico que un país petrolero, que tiene una de las mayores capacidades de refinación de petróleo del mundo, padezca tan abominable situación. 

Efectivamente, la capacidad instalada de refinación nacional es de 1.300.000 millones de b/d, la producción de cada una de las refinerías es la siguiente: el Complejo de Refinación de Paraguaná (Amuay y Cardón) alcanza a 955.000 b/d; la Refinería de Puerto la Cruz 310.000 b/d; la Refinería El Palito, en Carabobo 187.000 b/d; en la Refinería Bajo Grande en Zulia 16.000 b/d y la Refinería San Roque en Anzoátegui 5.200 b/d. Según las ultimas noticias, el complejo de refinación de Amuay estuvo parado desde marzo del 2025 debido a un apagón, cuando producía 38.000 b/d. La refinería Cardón en junio de 2025, también enfrentó una parada total por un apagón eléctrico, la refinadora ya “sufría interrupciones frecuentes después de años de escasa inversión, mala gestión, y sanciones de estados Unidos que impiden la importación de repuestos”. Mientras que El Palito padeció un enorme incendio en agosto del 2020, otro mayor, en noviembre del 2021, para abril de este año llevaba 11 meses sin funcionar.

De acuerdo con la información oficial de PDVSA, para el 2024 se refinaron 106.000 b/d y en el mismo reporte mencionan 45.000 b/d de diésel, lo que constituye apenas 8,2% de capacidad utilizada. Conociendo el nivel de los paros por fallas eléctricas, recurrentes incendios, falta de mantenimiento, repuestos, y si a esto le sumamos la incompetencia, no son de extrañar tales resultados.

Debido a la brecha entre demanda y oferta de gasolina, además de la necesidad de mezclas para producirla localmente, el gobierno ha tenido que importar tanto la gasolina como las mezclas. La información disponible, por supuesto, es incompleta. Se informó que en el 2022 se importaron gasolinas y mezclas de Estados Unidos e Irán en un promedio de 78.170 b/d bajando en el 2023 a 59.545 b/d. Para el 2024 se tienen estas cifras parciales: entre noviembre del 2023 y marzo del 2024 se importaron de Estados Unidos 73.400 b/d. Mientras que, en abril de ese mismo año, PDVSA compró 57.000. La última información que manejamos es que a comienzos de 2025 se reportó que PDVSA redujo en un 80% sus importaciones de diluyentes estadounidenses. Ante el bloqueo, el gobierno venezolano ha recurrido a Chevron para traer combustible desde las Islas Vírgenes, sin conocerse hasta ahora el resultado final de esta gestión.

Si hacemos unos ejercicios cuantitativos, podemos apreciar cómo ha disminuido el consumo de gasolina por vehículo, de 25 litros por día en el 2012 a 7 u 8 litros diarios en la actualidad. De forma que el déficit ha repercutido en la disminución del consumo, situación cónsona con la contracción económica del país.

Consumo por vehículo

Datos estimados del parque automotor:

• 2012: ~4,2 millones de vehículos
• 2021: ~2,8 millones (por desuso, falta de repuestos, migración)
• 2023: ~3 millones aprox.

Para tener una referencia:

Gerardo Lucas. Economista e Historiador. Https// gerardolucas@wordpress.com