La consentida de Simón Bolívar y Antonio José de Sucre, Bolivia, retorna a la democracia y, esperamos, a la estabilización, a la paz, nombre que enaltece su capital. Se suma en el continente a entregar esos mismos conceptos: democracia, estabilidad y paz, asociados a la libertad, para beneficio de sus ciudadanos.
Dentro de 10 días sabremos el resultado anhelado por todos los demócratas de América Latina, aunque ya quedó claro que las casi dos décadas del desatrozo gobierno del MAS en Bolivia quedaron muy atrás. Otra derrota para la deshausiada izquierda latinoamericana, que, como triunfo de la razón política trascendente en estos duros momentos para la región, nos complace enormemente.
Afortunadamente los sondeos de opinión los lídera don Tuto Quiroga, un fuerte amigo de Venezuela, expresidente de ese país, quien tiene la experiencia, el cúmulo de sabiduría, para volver a gobernar nuestra hermana nación e incorporarla a la lucha que se libra en el continente por la restauración en él de la democracia.
Tuto siempre ha estado pendiente de todo lo que ocurre en nuestro país, y será un enorme paso, tanto para Bolivia como para Venezuela, su elección el 19 de octubre. Faltan apenas días para conocer la fabulosa noticia de que vuelve a ser el presidente anhelado por los bolivianos. Lo veremos entonces recomponer ese país e integrarlo al bloque contrario a las dictaduras y las crueldades contra la ciudadanía.
Quiroga, un feroz critico en especial de lo que nos ocurre a los venezolanos, si no cejó en aprovechar todas las oportunidades de su respetado rango como expresidente, al integrar grupos pro-democraticos como el sólido IDEA, al llegar a la presidencia, como esperamos y los bolivianos indican en las consultas que pulsan su opinión, será mucho mayor su apoyo a la conquista de la libertad nuestra y en nuestra AL.
De verdad, me enormemente esa ruta de Tuto Quiroga a la presidencia de Bolivia, por su país y el nuestro, por todo lo que hará por la libertad. Le deseo el mayor de los éxitos, se lo merece. Los venezolanos debemos reconocer y ser recíprocos con quien ha dado sus mayores esfuerzos por nosotros en cada escenario, en cada enunciación, en cada gesto, en cada acción. Hoy Quiroga destaca en el panorama político latinoamiercano, con justa razón. Otra trinchera que se abre al mundo y se les cierra a los sátrapas del continente.
